El colegio es el segundo hogar, donde niños y jóvenes comparten la mayor parte de su tiempo, en compañía de su círculo de amigos, profesores y directivos. Es allí donde niños y jóvenes fortalecen sus VALORES, los practican e incluso enseñan a otros a vivenciarlos. Sin embargo, actualmente se observa con gran tristeza como niños y jóvenes experimentan situaciones estresantes, donde sus mismos compañeros los amenazan, se burlan y los retan para pelear al salir del centro educativo. Es constante y va en aumento este tipo de comportamientos inadecuados, que muchas veces pone en riesgo la vida de los implicados. Ante esto los adultos se cuestionan una y otra vez, ¿Por qué sucede? y las respuestas serían innumerables. Lo que si es cierto es que este tipo de conductas son aprendidas, ¿Dónde? Para dar respuesta a este interrogante es necesario primero adentrarse en el seno del hogar y reflexionar sobre las conductas que papá y mamá tienen frente a sus hijos, será que reaccionan violentamente cuando están enojados, prevalece la tolerancia, el trato con respeto y afecto, cómo solucionan sus conflictos o desacuerdos, son importantes las opiniones y sugerencias de los hijos ante algún problema familiar, cómo es la capacidad de escucha, qué tipo de lenguaje, vocabulario o expresiones se manejan (porque es imposible pedirle a un hijo que no sea grosero cuando el vocabulario habitual de papá y mamá es soez); en fin se podría decir que la raíz de este tipo de actitudes inapropiadas nace en el hogar y se extiende a todos los lugares donde niños y jóvenes se relacionan con los demás. Por esta razón, el colegio como centro de formación vigila el actuar de sus educandos, corrige, aconseja, sanciona, promueve los VALORES; pero en últimas la gran responsabilidad es de los padres de familia, ya que es en el hogar donde se construyen las bases que sustentan el actuar de cada uno de sus miembros.
EN EL COLEGIO SE REFUERZAN LOS VALORES,
APRENDIDOS EN CASA
COMENTARIOS: davaloratuvida@gmail.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario